Los fumadores que intentan dejar el tabaco beben menos alcohol que otros fumadores, sugiere un nuevo estudio.

Los investigadores analizaron datos de una encuesta de casi 6,300 fumadores en Inglaterra, que incluyó a 144 que dijeron que habían intentado dejar de fumar en la semana anterior a la encuesta.

Los que intentaron dejar los cigarrillos bebían menos alcohol y eran menos propensos a darse un atracón de bebida que los que no intentaron de dejar de fumar.

"Esos resultados van contra la opinión común de que las personas que dejan de fumar tienden a beber más para compensar. Es posible que estén siguiendo el consejo de intentar evitar el alcohol debido a su vínculo con las recaídas", apuntó el autor líder del estudio, Jamie Brown, del Colegio Universitario de Londres.

Los motivos de los hallazgos no están claros. Quizá los fumadores bajen su consumo de alcohol cuando intentan dejar de fumar para reducir el riesgo de recaída, o quizá las personas que beben menos sean más propensas a dejar de fumar, sugirieron los investigadores.

Si esto último es así, los fumadores que son bebedores más empedernidos podrían necesitar ayuda adicional para dejar de fumar, según Brown.

Los hallazgos aparecen en la edición del 21 de julio de la revista BMC Public Health.

"Todavía no podemos determinar la dirección de la causalidad. Se necesita más investigación para desenredar si los intentos para dejar de fumar preceden a los intentos por restringir el consumo de alcohol o viceversa. También necesitaríamos descartar otros factores que hacen que ambas cosas sean más probables", apuntó Brown en un comunicado de prensa de la revista.

Fuente: Medline Plus