La actriz y activista Angelina Jolie figuró en las noticias el mes pasado cuando anunció que se había hecho extraer los ovarios, luego de haberse sometido a una doble mastectomía preventiva en 2013, debido a que es portadora de BRCA, una mutación genética que incrementa considerablemente el riesgo de cáncer de mama y de ovario.
Jolie no tenía cáncer pero se sometió a ambas cirugías para reducir su riesgo de esta enfermedad. Ahora, un nuevo estudio respaldó la extracción preventiva de los ovarios en mujeres con cáncer de mama que también portan la mutación BRCA1. Las mujeres pueden reducir considerablemente su riesgo de morir a causa del cáncer de mama si se someten a la extracción de ovarios ("oforectomía"), y mientras más pronto lo hagan mejor, según los investigadores.
"Al practicar una oforectomía poco después de un diagnóstico de cáncer de mama, podemos aumentar la probabilidad de que una mujer con una mutación BRCA1 sobreviva a este cáncer", dijo la investigadora del estudio Kelly Metcalfe, profesora de medicina y enfermería en el Instituto de Investigación del Colegio de la Mujer en la Universidad de Toronto.
¿Qué tan pronto es ideal? "Sugerimos que antes de que transcurra un año", dijo Metcalfe.
Cuando las mujeres se enteran de que son portadoras de BRCA, comentó Metcalfe, normalmente se les informa de que su riesgo de padecer cáncer de mama y cáncer de ovario se eleva considerablemente. También se les asesora sobre las mastectomías y las oforectomías preventivas. El nuevo estudio señala la importancia de realizarse esa cirugía lo antes posible, de acuerdo con Metcalfe.
Sin embargo, la decisión de hacerlo es difícil. Cualquier cirugía conlleva riesgos y la extracción de los ovarios antes de la menopausia puede provocar que esta se presente de manera temprana.
"Hay quienes eligen no extraerse los ovarios sino hasta que hayan terminado de tener hijos", dijo la doctora Stephanie Bernik, jefa de oncología quirúrgica en el Hospital Lenox Hill en Nueva York.
Si bien los investigadores encontraron un vínculo entre la extracción de los ovarios en las mujeres con BRCA1 y un menor riesgo de muerte por cáncer de mama, no pueden demostrar una relación causa y efecto. Sin embargo, los investigadores tomaron en consideración muchos factores, como el tipo de tumor y el plan de tratamiento, para dilucidar el efecto que tenía la cirugía, señaló Metcalfe.
Para el estudio, publicado en línea el 23 de abril en la revista JAMA Oncology, los investigadores dieron seguimiento a 676 mujeres que tenían cáncer de mama en etapa temprana y portaban las mutaciones BRCA1 o BRCA2.
Alrededor de la mitad se hizo extraer los ovarios.
Las mujeres se habían sometido a tratamiento para el cáncer de mama, lo que incluyó una mastectomía y una tumorectomía, según el reporte.
En general, más de 77 por ciento de las mujeres sobrevivió durante los 20 años de seguimiento al momento del diagnóstico, según mostraron los resultados.
Las mujeres a las que se les extrajeron los ovarios tuvieron una reducción de 56 por ciento en fallecimientos por cáncer de mama, en comparación con las mujeres que mantuvieron los ovarios, de acuerdo con el estudio. Cuando los investigadores analizaron únicamente a mujeres con mutaciones BRCA1, las que se habían hecho extraer los ovarios tenían un riesgo de fallecer debido al cáncer de mama 62 por ciento menor que las portadoras de BRCA1 que no lo hicieron.
Las mujeres con BRCA2 que se hicieron extraer los ovarios tuvieron un menor riesgo de morir por cáncer de mama que las portadoras del BRCA2 que conservaron los ovarios, pero la disminución en el riesgo no fue suficientemente grande para considerarse estadísticamente significativa, según los investigadores.
Nueve mujeres del grupo que conservó los ovarios murieron de cáncer de ovario a lo largo del periodo de seguimiento, según el reporte.
En promedio, la extracción de ovarios se realizó seis años después del diagnóstico de cáncer de mama pero una oforectomía más temprana ofrecía una mayor reducción en el riesgo de morir por cáncer de mama, de acuerdo con los hallazgos del estudio.
Por ejemplo, quienes tenían una mutación de BRCA1 y se hicieron extirpar los ovarios en los primeros dos años tuvieron una reducción del riesgo de morir de entre 62 y 73 por ciento, dijo Metcalfe.
El equipo de Metcalfe encontró que el efecto protector de la extracción de los ovarios fue especialmente fuerte si las mujeres tenían el tipo de cáncer de mama conocido como de receptor de estrógeno negativo (RE-negativo), y superaban los 50 años de edad.
El hallazgo general de una reducción en las muertes por cáncer de mama en quienes se habían extraído los ovarios no resultó sorprendente según Bernik, quien no participó en el estudio. Sin embargo, el fuerte beneficio para quienes presentaron cánceres RE-negativos sí la sorprendió.
Ella dijo que es posible que un estudio más grande hubiera encontrado un beneficio más significativo de la extracción de los ovarios para las pacientes con el BRCA2. Debería llevarse a cabo un estudio de este tipo, añadió.
Fuente: Medline Plus