Los adultos mayores que sobreviven a un accidente cerebrovascular (ACV) podrían tener un riesgo más alto que el promedio de contraer cáncer en los próximos años, sugiere un estudio reciente.
Los investigadores siguieron a casi 3,700 supervivientes de ACV isquémico que al principio estaban libres de cáncer. Durante el seguimiento de dos años, el 2 por ciento recibieron un diagnóstico reciente de cáncer. Los investigadores determinaron que su riesgo de un diagnóstico de cáncer era un 40 por ciento más elevado que la norma entre los adultos mayores de EE. UU.
Los expertos dijeron que el motivo de que el riesgo fuera elevado no era claro. Probablemente eso se deba a que el estudio no se diseñó para descubrir una causa. Solo se diseñó para buscar un vínculo entre las afecciones. Pero la asociación quizá tenga algo que ver con los factores de riesgo subyacentes tanto del ACV como de ciertos cánceres, por ejemplo fumar o unos hábitos de alimentación malsanos.
Otro culpable potencial es la inflamación crónica de bajo grado, que se cree que contribuye tanto a los problemas cardiacos como al cáncer, dijo el Dr. Philip Gorelick, especialista en accidente cerebrovascular de Mercy Health y de la Universidad Estatal de Michigan en Grand Rapids, que no participó en el estudio.
Pero aunque el "porqué" aun no está claro, los hallazgos amplían la evidencia de un vínculo entre el ACV y el cáncer, según Gorelick.
"En la práctica, vemos a personas con un cáncer [no diagnosticado] que se presentan primero con un ACV", explicó Gorelick. Con frecuencia, eso se relaciona con tumores del colon o del páncreas. Los cánceres pueden provocar un coágulo sanguíneo en las arterias que alimentan al cerebro, lo que entonces provoca un ACV isquémico, la forma más común de ACV, señaló.
El investigador líder, el Dr. Malik Adil, del Instituto de Accidente Cerebrovascular Zeenat Qureshi en St. Cloud, Minnesota, dijo que de hecho es posible que algunos de los supervivientes del estudio actual tuvieran cáncer antes del ACV, pero que no se hubiera reconocido.
Pero tanto Adil como Gorelick enfatizaron que los supervivientes de ACV no deben entrar en pánico. La gran mayoría de los pacientes del estudio no contrajeron cáncer durante el seguimiento de dos años.
"El riesgo de cáncer aumentó en relación con la población general, pero no fue un riesgo alto", dijo Gorelick.
Adil presentó los hallazgos el martes en la reunión anual de la Asociación Americana de Accidentes Cerebrovasculares (American Stroke Association), en Nashville. Los estudios reportados en reuniones médicas por lo general se consideran preliminares hasta que se publican los hallazgos en una revista revisada por profesionales.
Según Gorelick, será importante averiguar si los supervivientes de ACV están en un riesgo más alto de tipos particulares de cáncer. De esa forma, quizá sea posible realizar recomendaciones personalizadas de pruebas de detección.
Otra pregunta que es "extremadamente interesante" para Gorelick es si los supervivientes de ACV que toman una aspirina diaria de dosis baja tienen un riesgo más bajo de contraer cáncer. Anotó que otras investigaciones han sugerido que la aspirina puede reducir esas probabilidades, sobre todo el riesgo de cáncer de colon.
Por ahora, Adil sugirió que los supervivientes de ACV hablen con el médico sobre los posibles factores de riesgo de cáncer (como fumar, o unos antecedentes familiares potentes de un cáncer en particular) y averigüen qué pueden hacer para abordarlos.
Gorelick se mostró de acuerdo. "Es demasiado pronto para hacer alguna recomendación especial sobre las pruebas de detección, ya que no sabemos si el ACV se asocia con cánceres concretos", dijo.
Pero añadió que los supervivientes deben seguir visitando al médico, trabajar con cualquier factor de riesgo modificable del cáncer, y hacerse las pruebas de detección que ya se recomiendan de forma rutinaria, como pruebas para el cáncer de colon a partir de los 50 años de edad.
Fuente: Medline Plus
La Declaración Mundial sobre el Cáncer reconoce que para lograr reducciones importantes en las muertes prematuras, la educación innovadora y las oportunidades de capacitación para los trabajadores de la salud en todas las disciplinas de control del cáncer deben mejorar significativamente.
ecancer desempeña un papel fundamental en la mejora del acceso a la educación para el profesional médico. Todos los días ayudamos a médicos, enfermeras, pacientes y sus defensores a ampliar sus conocimientos y mejorar la calidad de la atención.
Gracias por tu apoyo.