El sol tiene múltiples efectos beneficiosos, pero también tiene efectos perjudiciales ya que es el responsable del cáncer de piel, cuyo número de casos se duplica cada 10 a 20 años, dependiendo del país.
Dentro de los tumores malignos de piel, los más frecuentes son el carcinoma basocelular, el espinocelular y el melanoma.
"El melanoma es el tumor responsable del 80 por ciento de los fallecimientos por cáncer de piel. Junto con el cáncer de pulmón y el linfoma no Hodgkin, son las únicas neoplasias que aumentaron su incidencia en todo el mundo", afirmó Pablo José Pérez Mesa (MN 110549), médico del Servicio de Oncología Clínica del Hospital Italiano de Buenos Aires e integrante del equipo de Fundación Tiempo de Vivir.
"Todos podemos tener un melanoma, aunque los pacientes de mayor riesgo son aquellos con antecedentes familiares, piel clara, quemaduras solares en la infancia, con alto número de lunares y exposición frecuente a rayos UVA (por ejemplo, a través de camas solares)", indicó Pérez Mesa.
Las recomendaciones para la época de verano son: utilizar productos con máxima protección solar, aplicado cada 2 horas; la exposición gradual al sol evitando horarios pico; no exponer al sol a bebés o chicos menores de 6 años.
La regla del "A, B, C y D"
"Cuanto antes se detecte el tumor de piel, son mayores las chances de curación", afirmó Pérez Mesa.
Las lesiones sospechosas pueden caracterizarse por una simple regla con las primeras letras del Abecedario, "la regla del ABCD":
A: Asimetría
B: Bordes irregulares
C: Color, suelen ser múltiples en la misma lesión, pudiendo verse colores como el rojo, azul o blanco
D: Diámetro superior a 6 milímetros.
Cirugía y drogas
La cirugía es el principal tratamiento curativo, dependiendo de su localización.
En los últimos años, hubo muchos avances en el desarrollo de drogas que pueden mejorar la sobrevida de aquellos pacientes no candidatos a cirugía. (NA)
Fuente: La Nueva - Argentina