Un equipo de biólogos de la Universidad Johns Hopkins, en EE.UU. ha identificado una clase única de células de cáncer de mama responsables del iniciar el proceso invasión en los tejidos circundante. Y debido a que la invasión es el primer paso en la metástasis, los expertos creen haber identificado un «punto débil» en la armadura de cáncer y por ello, una posible nueva diana para el tratamiento del cáncer.
«La metástasis es la mayor amenaza para las pacientes con cáncer de mama», apunta Andrew Ewald. «Y nosotros encontrado una manera de detener la primera parte del proceso, aunque sea ratones».
En el trabajo que se publica en Cell, Ewald explica que antes de que se produzca la metástasis, las células que están localizadas en el borde de un tumor, que reciben el nombre de células líder, forman un especie de «protuberancias» en el tejido circundante, «como si alguien metiere un dedo del pie para probar el agua antes de bañarse», señala Ewald. Si las condiciones son adecuadas, las células líderes actúan de guías, a las que «siguen muchas células tumorales», y así escapan de los confines del tumor hacia un tejido sano. La metástasis completa se produce cuando las células tienen éxito en esta «migración», -a los pulmones, por ejemplo-, y se establecen para crear un nuevo tumor.
Debido a que determinadas células tumorales son más invasivas que otros, los investigadores cultivaron tumores procedentes de un ratón en el laboratorio en geles especiales en 3D que imitan el medioambiente que rodea a los tumores de mama en humanos. Así, observaron que las células cancerosas se infiltraban en forma de grupos en los geles, con unas pocas células por delante y el resto a continuación.
Células líderes
Y las líderes de este proceso son las células que ha identificado el equipo de Ewald. En concreto, han visto que la responsable era la proteína citoqueratina 14 o K14, presente en casi todas las células líder, pero muy poco habitual en las zonas no invasivas del tumor. Cuando el equipo analizó los tumores de los ratones que tenían otros tipos de cáncer de mama -unos más propensos a la invasión y otros menos -, en todos los casos había grupos de células con proteínas K14. De hecho, los tumores más invasivos eran aquellos que más células K14 tenían. (La función de la proteína K14 es ayudar a formar el «esqueleto» interno de muchos tipos de células, dotándolas de estructura y ayudando a que se muevan).
A continuación el equipo cultivó tumores de mama de 10 pacientes en geles de 3-D y vieron que las células líder en estos tumores humanos también contenían la proteína K14. «La investigación muestra que las células más invasivas en los tumores de mama expresan K14 en todos los tipos de cáncer de mama», señalan. «Ahora tenemos que aprender a eliminar estas células líder de los tumores de mama».
Para verificar su papel en la metástasis de una forma definitiva, los investigadores extrajeron los tumores de mama de los ratones y los dividieron en un dos grupos: experimental y control. Cada grupo de tumores fue expuesto a un virus reprogramado para portar trozos de material genético dentro de las células. El grupo experimental recibió el material genético diseñado para bloquear la producción de K14, mientras que el control recibió el material genético que no afectaba a las células. A continuación injertaron los dos grupos de tumores en ratones sanos: los tumores experimentales en un lado y los control en el otro lado del mismo ratón.
Proteína K14
Los investigadores dejaron crecer los tumores durante un tiempo, pasado el cual los extirparon y analizaron. Como era de esperar, las «células líder» seguían presentes en el grupo de control, mientras que en los experimentales no. Así, los tumores controles, que contenía K14, promovían la invasión del tejido sano, algo que no ocurría en los experimentales.
Aunque la aplicación clínica de esta información está todavía lejana, Ewald reconoce que ahora «ya sabemos qué células tumorales son las más peligrosas». Porque, añade, «sólo unas pocas células líder son suficientes para iniciar el proceso de metástasis, y pare ello requieren la proteína K14». Y debido a que K14 está presente en las células dentro de muchos otros órganos, puede desempeñar un papel similar en otros tipos de cáncer.
Fuente: ABC