Un modelo predice tendencias similares en los próximos 15 años, según el desarrollo socioeconómico de los países.

Un reciente análisis de tendencias indica que las tasas de incidencia y mortalidad por cáncer de cuello uterino se han mantenido estables o están disminuyendo en la mayoría de los países del mundo. Estas tasas difieren en función del nivel de desarrollo socioeconómico de cada país, del uso del cribado del cáncer de cuello de útero y de las tasas de vacunación contra el virus del papiloma humano (VPH). Los resultados han sido publicados por Wiley en línea en CANCER, una revista revisada por expertos de la Sociedad Americana del Cáncer.

El cáncer de cuello uterino es una enfermedad potencialmente prevenible, mediante el cribado para detectar y tratar las lesiones precancerosas y mediante la vacunación contra el VPH. Para revelar las pautas y tendencias mundiales más recientes del cáncer de cuello uterino, un equipo dirigido por el doctor Mingjuan Jin, de la Facultad de Medicina de la Universidad de Zhejiang (China), examinó la información publicada por el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer correspondiente a 31 países.

Los investigadores descubrieron que las tasas de incidencia y mortalidad por cáncer de cuello de útero eran más bajas en los países más desarrollados desde el punto de vista socioeconómico. Además, tanto las tendencias pasadas como las previstas parecen ser estables o decrecientes en la mayoría de los países, especialmente en los que cuentan con programas eficaces de cribado del cáncer de cuello de útero y de vacunación contra el VPH.

En los 10 años más recientes, 12 países tuvieron tasas de incidencia de cáncer cervical estables, 14 tuvieron tasas decrecientes y cinco tuvieron tasas crecientes. En cuanto a la mortalidad por cáncer de cuello uterino, 12 países tuvieron tasas estables, 18 tuvieron tasas decrecientes y uno tuvo una tasa creciente.

En las predicciones para los próximos 15 años para 27 países, se espera que la mayoría tenga tendencias estables o decrecientes. Se prevé que diez tengan tasas de incidencia estables, nueve tengan tasas decrecientes y ocho tengan tasas crecientes. En cuanto a la mortalidad por cáncer de cuello de útero, se prevé que 16 tengan tasas estables, 10 tengan tasas decrecientes y uno tenga una tasa creciente.

"Los programas eficaces de cribado del cáncer de cuello de útero y la vacunación contra el VPH deberían popularizarse más para aumentar su cobertura y, en última instancia, disminuir la carga del cáncer de cuello de útero a corto, medio y largo plazo", dijo el Dr. Jin.

Referencia: Wiley