Vencer el pánico con conocimiento: lecciones de la Radioterapia moderna
Estimados amigos, es un honor para mí, darles la bienvenida al módulo de Radioterapia para el Congreso ecancer orientado a personas no asociadas al área de salud (pacientes, familiares, acompañantes, gente intelectualmente inquieta).
Hablar de radiación es invitarnos a enfrentar una suerte de tema tabú que la sociedad, sin necesariamente proponérselo, nos ha condicionado a temer: son de sobra conocidos las consecuencias de los accidentes en plantas de energía eléctrica nucleares como la de Chernóbil (la serie que recientemente HBO produjo volvió a poner en evidencia la responsabilidad detrás de trabajar con elementos potencialmente tan peligrosos) y más recientemente en Fukushima; a más de alguno de ustedes seguramente le ha tocado acompañar o conocer personas que tuvieron que enfrentarse a terapias basadas en radiación y por lo tanto obligados a mantenerse en aislamiento por un período de tiempo (para evitar riesgos en contactos cercanos) o evidenciando efectos no deseados que muchas veces deterioraban fuertemente la calidad de vida.
Es debido a estos, entre quizás tanto otros elementos, es que quienes practicamos esta diciplina nos vemos diariamente enfrentado a pacientes y familias cargados de dudas y prejuicios, que de no ser resueltos con dedicación y empatía, harían imposible ofrecer los beneficios que la ciencia consistentemente ha expuesto en relación a esta modalidad terapéutica.
En las siguientes presentaciones intentaremos explicar en forma entendible de que hablamos cuando ofrecemos radiación para tratamientos del cáncer: cuál es la racionalidad de su indicación, cuál es su forma de actuar, como la ciencia, con el paso del tiempo, ha logrado definir con mayor claridad aquellas indicaciones racionales de aquellas que han debido abandonarse, así como también como evitar generar defectos los órganos corporales que debemos cuidar.
Y es porque hoy más que nunca, la Radioterapia ha ganado un espacio irreemplazable en el manejo del paciente Oncológico, que debemos combatir el pánico, crear conocimiento y obtener los mejores beneficios que esta compleja diciplina llamada Oncología tiene por ofrecer.
Dr. Federico Bakal,
Fundación Arturo López Pérez (FALP), Chile